La pobreza energética

912 171 879

Categorías

Puedo dar por hecho que la mayoría de vosotros disfrutáis habitualmente de una agradable calefacción en invierno y de un refrescante aire acondicionado en verano. Y, sin importar la calidad o precio del aparato que utilicéis para ello, tengo por seguro que, si tenéis los medios para leer este artículo desde un dispositivo móvil o PC con acceso a Internet, también tendréis lo anteriormente citados.  

Sin embargo, pretendo adentraros en algo que probablemente os suene lo hayáis o no sufrido, la pobreza energética. 

 

Esta moderna clase de pobreza viene de la mano de la capacidad de los individuos de acceder a fuentes energéticas como la electricidad y calefacción. Existen dos escenarios posibles: 

  • En los países del primer mundo, donde a priori todos o prácticamente todos los individuos deberían de tener acceso a estas energías en sus hogares, no acaba siendo tan utópico. En estas naciones, las personas en pobreza energética no tienen los suficientes medios para realizar el pago constante de las facturas y servicios energéticos o bien si pueden pagarlos, pero a costa de sacrificar la mayor parte de su presupuesto del mes y, por ende, perdiendo capacidad de pagar otras tantas cosas, como el alimento. En España, por ejemplo, aproximadamente 4 millones de personas se encuentran en esta situación, viéndose obligados a recurrir a mecanismos de climatización y calefacción muchos más tradicionales y desfasados. 

 

  • El segundo escenario es el que afecta a más personas en todo el mundo, puesto que es el que tiende a ocurrir en los países subdesarrollados. En estas naciones directamente el acceso a estas formas de energía y confort son o nulas o escasas. Deriva todo de las bases económicas del país en cuestión, junto con la falta de infraestructuras que permitan facilitar la energía. 

 

En ambos casos existe la desigualdad energética que afecta de forma directa en la vida de las personas. Hay tres causas que generan esta precariedad energética: 

 

  • Bajos ingresos en el hogar 
  • Calidad insuficiente de la vivienda  
  • Precios elevados de la energía 

 

A raíz de este problema y la percepción y conciencia que han ido tomando los países a lo largo de los años, han surgido otros conceptos que pueden presagiar la pobreza energética. 

La vulnerabilidad energética es la propensión a experimentar una situación de pobreza energética. En otras palabras, situaciones en las que un hogar aún no se encuentra en mal estado energético, pero donde existe la posibilidad de acabar como tal. Esta vulnerabilidad es temporal y puede verse afectada por factores internos o externos 

-Los internos harían referencia al nacimiento de un hijo o la enfermedad de un integrante de la familia, factores, que, a fin de cuentas, provocan un gasto de dinero extra en el núcleo familiar, dificultando por ende el pago de las facturas. 

-Los externos, no dependen de los integrantes del hogar, como la denegación de una ayuda social. 

 

Actualmente, en el contexto europeo, la consciencia de este problema ha suscitado la aparición de políticas de protección a la hora de fomentar otros tipos de energías y de esa forma se procura no dejar a nadie atrás. 

 

Como veis, la igualdad energética en los países del mundo aún queda lejos, más todavía en los países del tercer mundo. Pero, por suerte, también está presente la cooperación conjunta entre las Naciones para un futuro mejor para todos. 

 

José Francisco Bullón Molina 

What do you want to do ?

New mail

TE LLAMAMOS Y TE LO EXPLICAMOS TODO

    Memorias y Proyectos para Instaladores

    Curso de Instalador realiza memorias y proyectos para instaladores desarrollados por instaladores e ingenieros. ¡Clic para más información!

    Echale un vistazo a nuestros cursos