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Sevilla, la primera ciudad en tener baldosas fotovoltaicas.
Desde el año 2020 el auge de los patinetes eléctricos se ha notado considerablemente, llegando a ascender hasta un 142% respecto al año anterior, según datos aportados por el portal Idealo.
Estos “juguetes” se han convertido en una nueva alternativa de transporte para muchos ciudadanos, ya que gracias a ellos consiguen mayor independencia, evitan atascos y reducen las emisiones de CO2 a la atmósfera. El gran problema surge cuando muchas de estas personas se quedan sin batería y no tienen donde dejar sus patinetes cargando.
Solum, una empresa sevillana creada en 2019 por tres amigos ingenieros, ha llevado a cabo en diciembre de 2021 un proyecto en el que se ha desarrollado una baldosa a partir de paneles fotovoltaicos convencionales a los que se le aplica una serie de procesos que los convierten en pavimento.
Esta baldosa, localizada en las calles de la ciudad, sirve para poder recargar los vehículos eléctricos ligeros, como los patinetes. Además, permite obtener energía solar sin alterar el entorno urbano, colaborando de esta forma a crear ciudades más sostenibles y una micromovilidad capaz de recargarse con una energía 100% limpia.
Asimismo, dicha baldosa la cual tiene una gran resistencia, no necesita conexión a la red ni exige ningún tipo de mantenimiento, por lo que puede implantarse en cualquier lugar. Este suelo solar tiene capacidad de hasta ocho patinetes de forma simultanea y su tiempo de carga es similar al utilizado cuando este vehículo se conecta de forma convencional.
La estación de carga permite al usuario reservar y dejar su patinete de forma segura a través de la App de Solum.
El coste de esta acción oscila entre los 700 y los 1.000 euros. Los ingenieros de Solum han explicado que este proyecto es tan barato por que no necesita ningún tipo de obra para su instalación y además puede transportarse sin ningún problema.
El publico principal de este plan son por ejemplo lo gimnasios, centros comerciales o centros educativos entre otros. Esta nueva baldosa sola ya esta disponible en el Puerto de Valencia y en el Cartuja de Sevilla, y su próximo objetivo es instalarlo en dos de los intercambiadores de Madrid y en la Universidad de Salamanca a través de un proyecto con la empresa Iberdrola.
Gracias a esta idea, financiada por Naturgy, Telefónica y el Instituto Tecnológico Europeo, Solum presume de ser la única empresa en el mundo que cuenta con esta tecnología y de hacerlo en Sevilla con proveedores locales, fomentando de esta forma la economía local y ayudando a crear un mundo más sostenible promoviendo los transportes sin emisiones para avanzar hacia ciudades más limpias.
Nerea Serrano Ruiz
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